Skin fasting, la técnica japonesa para cuidar la piel que tú también querrás probar

El minimalismo es tendencia en el mundo de la decoración, de la moda, y también en el de la belleza. El skin fasting es una técnica japonesa que se ha convertido en tendencia y que lleva por bandera el lema «menos es más». De lo que se trata es, básicamente, de simplificar la rutina de cuidado de la piel.

Aunque es un dato que muchas personas desconocen, lo cierto es que la piel también se estresa por la contaminación, los rayos solares, el frío, el uso de determinados cosméticos… Como resultado, aparecen granitos y rojeces, así como otras imperfecciones en el rostro.

Los defensores del skin fasting aseguran que el ayuno ‘desintoxica’ y permite a la piel recuperar su poder autorregulador. Cuando utilizamos productos para su cuidado, le enseñamos qué tiene que hacer o cómo debe reaccionar ante ellos, frenando así su ciclo natural.

Consiste en mejorar la forma en la que funciona la piel, sin la necesidad de recurrir a múltiples productos que solemos aplicarnos a diario.

¿Cómo poner en práctica el skin fasting?

Por lo tanto, con el skin fasting lo que se busca es darle un respiro al cutis para que se recupere y regenere por sí mismo, de forma completamente natural. Ahora bien, del mismo modo que las dietas milagro y otras tendencias que son temporales, esta técnica japones atiene sus pros y sus contras.

Solemos utilizar muchos cosméticos para el cuidado de la piel del rostro: cremas, sérums, ampollas, tónicos revitalizantes… Eliminarlos todos de golpe puede ser contraproducente, tal y como alertan los expertos.

Lo ideal es interrumpir la aplicación de los cosméticos de forma progresiva, hasta quedarnos únicamente con los esenciales. Tan solo hay un producto que es indispensable para todo tipo de pieles durante todo el año: el protector solar.

Los expertos recomiendan que alarguemos el proceso de ayuno entre una y dos semanas para que la piel del rostro se regenere. Una vez transcurrido este plazo, podemos volver a reincorporar de manera paulatina cada producto, comenzando por los básicos.

Algunos amantes de la belleza recomendan cesar por completo la rutina facial con el skin fasting, mientras que otros consideran que es suficiente con eliminar los cosméticos. En cualquier caso, depende de las necesidades específicas de cada piel y de lo que cada una deseemos conseguir.